domingo, 19 de agosto de 2007

Humo y Besos (Cuatro)

Violeta camina sin poner mucha atención a lo que hay a su alrededor. En su mano derecha lleva un cigarrillo sin encender y en su bolsillo la candela aguarda para ser utilizada. La única preocupación de Violeta es esa, el cigarrillo que baila en su mano. Nunca ha fumado y aún piensa si de verdad quiere hacerlo. Durante los últimos días no se ha sentido bien y considera que tal vez algo nuevo le ayude a disipar muchas de sus preocupaciones.

Calcula, una y otra vez, la manera de encenderlo. Ha visto el procedimiento mil veces, además Rojo es todo un maestro, pero no tiene la confianza suficiente para hacerlo y decide postergar paso tras paso el ritual de iniciación. Siente las miradas inquisidoras de la gente y cree verse ella misma como alguien que realiza una terapia para dejar de fumar pues el cigarrillo se pasea nerviosamente por los dedos de su mano y, si se mira con atención, se puede percibir el temblor. No es delirium tremens, solo físico miedo ¿a qué? Se pregunta también Violeta, una educación como la suya deja un incalculable miedo a transgredir las reglas, he ahí la respuesta.

Todavía falta un tramo para llegar al lugar acordado. Algunas goteras empiezan a caer y una da justo en el cigarrillo aún apagado de Violeta. "Bueno, pues llegó la hora" piensa. Con lentitud saca la candela, desliza el regulador de - a + y mueve la rueda que da libertad a la llama, la acerca a la punta del cigarrillo y aspira. No es una sensación agradable y para colmo aparece una molestia en la garganta. Se siente un poco culpable, solo puede imaginarse sus pulmones recibiendo un aire extraño. Se preocupa demasiado por sus pulmones, además para su oficio de bailarina los necesita lo más puros posible.

Respira profundo y se acerca de nuevo el cigarrillo, que reposa entre el dedo índice y el anular, a su boca "No sé por qué a la gente le gusta esto" piensa un poco desilusionada. El cigarrillo se cosume con rapidez y Violeta no puede evitar, y no sabe por qué, sentir pena de su acto. "Da igual, ya me lo fumé", presiona el filtro contra un muro y desecha la colilla en una deforme basura naranja que se sostiene de un poste.

Rojo espera sentado en lo que queda de un árbol talado. Mira las piruetas de quienes esperan ganar algunas monedas al ritmo de la luz roja del semáforo. Reconoce a Violeta a la distancia y por costumbre piensa en botar la colilla del cigarrillo, fue una reacción tonta, no estaba fumando.

Sonrieron y se dieron un beso lento y apasionado, ni muy largo ni muy corto.
- ¿Fumaste?
Pregunta Rojo aún sabiendo de antemano la respuesta.
Violeta no pronuncia ninguna palabra, mira a otro lado y deja escapar una sonrisa de culpable.
- ¿Por qué?
Indaga Rojo
- Créo que lo necesitaba...
- ¿Y eso?
- No, no. Después hablamos de eso, igual ni me gustó. Mejor abrazáme que te he extrañado un montón.
Rojo sonríe con algo de preocupación en su rostro. Abraza con vigor a Violeta y le da un beso en el cuello que la hace estremecer y soltar una carcajada.

La lluvia nunca prosperó, el viento logró llevarse lejos la nube gris que se había posado sobre la ciudad. Rojo y Violeta se tomaron de la mano y caminaron unas cuantas cuadras hasta llegar a un sitio donde la cerveza es barata y el limón y la sal tienen la medida exacta para conformar la bebida favorita de Violeta.

- No sabés cuánto necesitaba esto - Afirma Violeta mirando con placidez la fría cerveza con sal y limón.
- Creo que si lo sé, yo también - Contestó Rojo después de un trago largo de la misma sustancia.
- También tu compañía - Agrega Violeta.
Rojo prefiere que sus palabras sean algo menos volátil, por eso se acerca a darle un beso que deja en claro que también la ha extrañado.

Después de un par de cervezas abandonan el lugar, tomados de la mano deciden seguir el camino de la quebrada y recordar el día en que se conocieron...

3 comentarios:

  1. Jenny, con todo respeto, quisiera darte un consejo. Cuando escribes cosas como "lo que hay a su alrededor" podrías aprovechar para pintar lo que en efecto hay alrededor. Por ejemplo: Violeta camina sin poner mucha atención al viejo que está fritando butifarras ni al perro echado al pie del semáforo". El ejemplo no es muy bueno, pero ilustra lo que quería decir. Perdoname el atrevimiento.
    Por lo demás, creo que tienes una historia muy bonita y me da ansiedad de leer.

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  2. Vale, tenés razón, gracias por el consejo y también por leerme.

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  3. jennyU: Rojo es azul, estoy casi segura. Creo que no fuma, pero por lo demás funciona.

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